Lo que le propone al pueblo el Teniente coronel es nada más y nada menos que le apruebe constituir en Venezuela una autocracia totalitaria por tiempo indefinido. En eso consiste la novedosa reforma.
Antes los Dictadores les arrebataban sus libertades a los pueblos con violencia física y hoy intentan someterlos de una manera mas sofisticada como lo es la violencia legal. Pero lo realmente original del régimen que se le quiere imponer a Venezuela es que la violencia constitucional no será producto de la fuerza sino del “engaño” ya que este nuevo sistema lo votará el pueblo a través de un plebiscito. Es esto lo realmente novedoso: la trampa. El candidato vitalicio le consultará al pueblo si quiere que él lo mande indefinidamente permitiéndole ejercer solamente los derechos que él le permita ejercer y el pueblo, entre el entusiasmo y el engaño, le contestará que sí. Le preguntará al pueblo si acepta ser feliz a cambio de entregarle todas sus libertades a un solo ciudadano. Puede pensarse en una autocracia totalitaria mas democrática que ésta? Es esto lo que se plantea con la Reforma Constitucional.
Pero, cómo lograr que el ciudadano decida en ese plebiscito a favor del despojo de todas sus libertades? La vía para lograrlo es a través de ese acto simulado de plebiscito o consulta al ciudadano a través de la “caja negra” que desde el 15/08/04 es el C.N.E. Es esa Caja la que hará el milagro de que todo un pueblo le de el consentimiento a su auto- decapitación de manera silenciosa y sin dolor. A partir de ese momento el soberano pueblo de Venezuela, interpretada fielmente su voluntad por el C.N.E., le dirá al mundo que ha decidido ser esclavo para siempre del Teniente Coronel. Así de simple. Constitucionalistas de todo el mundo incluirán en sus libros una nueva institución política que será conocida como autocracia totalitaria por decisión popular. Institución novedosa ésta producto de la revolución bolivariana que así habrá ignorado por completo al Padre de la Patria quien dijo: “Nada es tan peligroso como dejar permanecer largo tiempo a un mismo ciudadano en el poder. El pueblo se acostumbra a obedecerle, y él a mandar, de donde se origina la usurpación y la tiranía (15/12/1819).
El artífice de toda esta maravilla será el propio Teniente Coronel a través del CNE como poder del Estado bien acreditado y confiable. Pero la pregunta es, podrá este CNE decidir por el Soberano para complacer al Teniente Coronel?. Revisemos rápidamente sus antecedentes. En Diciembre del 98 el CNE de la democracia le contó al Teniente Coronel 3. 600.000 votos y fue electo. En Febrero del 03, 3.500.000 venezolanos firmaron para que se le sometiera a un Referéndum Revocatorio y con las planillas planas y los reparos se intentó desconocer esas firmas. Pero no pudo. El peligro de la revocatoria del mandato era muy alto y fue entonces cuando el CNE, a través de la votación electrónica, hizo el milagro de que los votos del SI le fueran adjudicados al NO. El CNE quedó desde entonces blindado para interpretar, a su gusto, la voluntad popular como lo hizo el 6 de Diciembre del 2006 y como lo hará cuando tenga que contar los votos del plebiscito constitucional. Igualito…
La conclusión es obvia: la Sociedad Democrática si no quiere ser nuevamente burlada tiene que lanzarse a la calle y exigir la reforma total previa del C.N.E. y de toda su metodología no tan imparcial como aquella que lo eligió en Diciembre del 98. Esta debiera ser la consigna para unir a todos los venezolanos si quieren seguir siendo libres. Si esto no se hace pasarán a ser colaboradores por omisión en la instauración de una autocracia totalitaria por decisión popular (?) como en Cuba con todas las consecuencias que esto tiene. No hay que preocuparse. Hay que movilizarse ya.
Antes los Dictadores les arrebataban sus libertades a los pueblos con violencia física y hoy intentan someterlos de una manera mas sofisticada como lo es la violencia legal. Pero lo realmente original del régimen que se le quiere imponer a Venezuela es que la violencia constitucional no será producto de la fuerza sino del “engaño” ya que este nuevo sistema lo votará el pueblo a través de un plebiscito. Es esto lo realmente novedoso: la trampa. El candidato vitalicio le consultará al pueblo si quiere que él lo mande indefinidamente permitiéndole ejercer solamente los derechos que él le permita ejercer y el pueblo, entre el entusiasmo y el engaño, le contestará que sí. Le preguntará al pueblo si acepta ser feliz a cambio de entregarle todas sus libertades a un solo ciudadano. Puede pensarse en una autocracia totalitaria mas democrática que ésta? Es esto lo que se plantea con la Reforma Constitucional.
Pero, cómo lograr que el ciudadano decida en ese plebiscito a favor del despojo de todas sus libertades? La vía para lograrlo es a través de ese acto simulado de plebiscito o consulta al ciudadano a través de la “caja negra” que desde el 15/08/04 es el C.N.E. Es esa Caja la que hará el milagro de que todo un pueblo le de el consentimiento a su auto- decapitación de manera silenciosa y sin dolor. A partir de ese momento el soberano pueblo de Venezuela, interpretada fielmente su voluntad por el C.N.E., le dirá al mundo que ha decidido ser esclavo para siempre del Teniente Coronel. Así de simple. Constitucionalistas de todo el mundo incluirán en sus libros una nueva institución política que será conocida como autocracia totalitaria por decisión popular. Institución novedosa ésta producto de la revolución bolivariana que así habrá ignorado por completo al Padre de la Patria quien dijo: “Nada es tan peligroso como dejar permanecer largo tiempo a un mismo ciudadano en el poder. El pueblo se acostumbra a obedecerle, y él a mandar, de donde se origina la usurpación y la tiranía (15/12/1819).
El artífice de toda esta maravilla será el propio Teniente Coronel a través del CNE como poder del Estado bien acreditado y confiable. Pero la pregunta es, podrá este CNE decidir por el Soberano para complacer al Teniente Coronel?. Revisemos rápidamente sus antecedentes. En Diciembre del 98 el CNE de la democracia le contó al Teniente Coronel 3. 600.000 votos y fue electo. En Febrero del 03, 3.500.000 venezolanos firmaron para que se le sometiera a un Referéndum Revocatorio y con las planillas planas y los reparos se intentó desconocer esas firmas. Pero no pudo. El peligro de la revocatoria del mandato era muy alto y fue entonces cuando el CNE, a través de la votación electrónica, hizo el milagro de que los votos del SI le fueran adjudicados al NO. El CNE quedó desde entonces blindado para interpretar, a su gusto, la voluntad popular como lo hizo el 6 de Diciembre del 2006 y como lo hará cuando tenga que contar los votos del plebiscito constitucional. Igualito…
La conclusión es obvia: la Sociedad Democrática si no quiere ser nuevamente burlada tiene que lanzarse a la calle y exigir la reforma total previa del C.N.E. y de toda su metodología no tan imparcial como aquella que lo eligió en Diciembre del 98. Esta debiera ser la consigna para unir a todos los venezolanos si quieren seguir siendo libres. Si esto no se hace pasarán a ser colaboradores por omisión en la instauración de una autocracia totalitaria por decisión popular (?) como en Cuba con todas las consecuencias que esto tiene. No hay que preocuparse. Hay que movilizarse ya.
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